¿Por qué certificar la acuicultura?
Las proyecciones indican que para 2050 la población mundial crecerá a más de 9 mil millones. Para enfrentar el desafío de alimentar a tantas personas, necesitaremos esencialmente duplicar nuestra producción actual de alimentos.
El pescado es un alimento ideal para alimentar nuestro planeta en crecimiento. Es un alimento rico en proteínas, bajo en grasas, saludable y nutricionalmente rico. El pescado también es uno de los convertidores más eficientes de piensos en alimentos de alta calidad, tiene una huella de carbono más baja y utiliza menos recursos que otros sistemas de producción animal. [1]
Sin embargo, los métodos tradicionales de pesca de captura silvestre no pueden ni cercanamente satisfacer la creciente demanda en aumento. Los recursos pesqueros son finitos y el 33% [2] de las poblaciones de peces marinos están completamente explotadas o sobreexplotadas. Incluso con prácticas sostenibles, la pesca marina ha llegado al límite de su oferta.
La acuicultura puede ser parte de la solución. La acuicultura es el sistema de producción de alimentos de más rápido crecimiento en el mundo y, más de la mitad del pescado que se consume en todo el mundo proviene ya de la acuicultura [3].
Pero el rápido aumento en la demanda de pescado cultivado presenta sus propios problemas. Cuando la acuicultura no está bien administrada, puede tener una variedad de impactos adversos, incluida la gestión deficiente del sitio, la contaminación del agua, la alteración de los ecosistemas locales y las malas condiciones de trabajo. Mientras más rápido crezca la industria acuícola, mayor será su impacto potencial sobre el medio ambiente, los trabajadores y las comunidades locales.
Ahora es el momento de abordar estos problemas. Al promover una piscicultura mejor administrada, podemos satisfacer la demanda creciente a la vez que minimizamos los impactos ambientales y sociales negativos.
[1] Alimentar a 9 mil millones para el año 2050 – Poner pescado de nuevo en el menú
[2] Circular de Pesca y Acuicultura de la FAO No. 1089
[3] Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura